En el momento que nací, fui diferente a los demás, y el tiempo solo hizo esa diferencia mas notoria, al grado de que me consideraban inútil para cualquier cosa, y en su mayoría era cierto; no acreditaba ni un requisito para ser Vikingo. Se me aisló, me volví un marginado, pero cuando lo conocí a el, las diferencias entre nosotros eran un abismo, pero eso no le impidió tratarme mejor que los de mi especie y darme lo único que siempre quise, la libertad de ser por primera vez quien yo quería ser, mi destino.