Desde chiquita, Mar, decía no creer en los príncipes azules, el amor verdadero o las hadas madrinas. El amor significaba una pérdida de tiempo, en especial a su edad (15 años) ya que las relaciones no duraban más que un rato. Nada cambia cuando conoce a Leo. ¿Le llama la atención? Si. ¿Le gusta? No, él es sólo una obsesión.All Rights Reserved
1 part