Control

Luego de años de prejuicios y rechazo, la República ha logrado aceptar a los humanos tipo A, personas que poseen ciertas habilidades que en antaño no existían y que eran incluso inconcebibles. Ya iban más de cincuenta años de igualdad entre los dos tipos de humanos gracias a un sistema de integración social que ayudó a equilibrar los derechos y deberes del ciudadano.
Annia es una tipo 1, es decir, una persona común y corriente y sabe muy bien que los tipo A son iguales a ella, que debe respetarlos como ellos la respetan y que no debe temerles a pesar de lo que sean capaces de hacer.
Era esta filosofía la que sostenía la vida en la República.
Annia conocía de primera mano lo que podían hacer los tipo A, pero a pesar de ello trataba de ser como cualquier otra persona y no quedarse atrapada en recuerdos pasados... Esta táctica le estaba funcionando a la perfección hasta que un día descubre que alguien cercano a ella escondía más secretos de los que pensaba.