Cada escrito tiene un por qué y un dónde. Mezcla de sucesos verídicos con algo de narrativa redundante y rimbombante, a veces burda y simplona.
Estos son mis horrocrux, estas son mis memorias, estos son mis deseos. Aquí está mi melancolía perpetua y mis madrugadas en escritos.
Aquí solo hay tristeza, espero no deprimirte más, aunque no lo lamentaría. Al final de los días, los hice para sacar una parte de mi que se aferró tanto, que echó raíces tan rápido y que se aferra a vivir.
Te recomiendo algo de beber, tal vez un café y un buen cigarro para leer.
Asher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel.
Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la chica está loca. Tiene una actitud tan dura que es difícil de romper y suele irritarlo todo el tiempo desde que se ha mudado a vivir con su hermano y él.
Y cuando los chicos del equipo le proponen que no conseguiría conquistar a alguien como Skye, lo ve como un reto que está dispuesto a jugar, una apuesta para conquistar el corazón de alguien como Skye es suficiente para que Asher acepte, pues es demasiado competitivo y no está dispuesto a perder su puesto en el equipo de hockey y pasarse el resto del año en la banca como le han apostado.
Sin embargo, a medida que conoce a Skye, Asher se da cuenta que la chica es todo lo contrario a lo que le ha tratado de demostrar, conquistarla no parece tan complicado como pensaba y el corazón de ella no parece ser el único en juego.