Nadie me dijo que estaría atrapada en este mar de recuerdos. Tu rostro se dibuja frente a mí, en este mundo paralelo. Me aferro al hilo plateado que me une a mis recuerdos de tantas vidas junto a ti; pensé que solo te había conocido una vez, pero el universo se encargo de juntar nuestras almas un sinfín de veces. Me miras atreves de tus pestañas largas y negras, con tus ojos cafés, ese café que se confunde en el borde con miel y verde; me miras intensamente, buscando de nuevo la razón de porque sigo flotando en este mar. Me arrepiento de hacerte daño, no soy capaz de volver a ti y decirte cuanto lo siento... -Te he perdonado hace mucho tiempo. Solo vuélveme a mirar, es lo único que te pido...