Cuando te enamoras lo haces de las pequeñas cosas de alguien, como el sonido de su risa o la manera en que brillan sus ojos cuando habla de algo que ama, esas cosas solo vas descubriendo con el tiempo, el como esa persona te deja ver y conocer cada vez más su manera de ser, sus pensamientos, sus pequeñas manías y a ti no te parecen extrañas, sino al contrario, te encantan y solo quieres saber más y es aún mejor cuando es recíproco, ahí la vida comienza a tener sentido, dejas de hacer las cosas de manera egoísta y ahora lo haces por él o ella.