Mi intención no era amarte

-Noto como me miras, no te resistas [...]. En poco más de un año serás libre. ¿Qué te preocupa? -ríe con la voz algo ronca-. ¿Acostarte conmigo y que termines enamorándote del "patán más idiota del mundo" en ese lapso? -vuelve a reír mientras se me acerca, susurrando lo último en mi oído.
-Sueñas en grande, Blanco -río de la misma forma que él, pero conteniendo mi respiración debido a su cercanía.
Algo en mí muere por gritarle que durante ese lapso lo único que intentaré será olvidar todo lo que con solo mirarlo provoca en mí.
Tengo que sacarme de la cabeza a este lindo idiota que solo piensa en él y en nadie más. ¿Cómo puedo engañarme diciendo que no siento nada por él, cuando ahora empiezo a creer todo lo contrario? ¿O es simplemente que necesito sentirme protegida y estoy confundiendo mis sentimientos? No hace tanto era un perfecto desconocido, y aun siendo tan hostil está logrando hacerme sentir cosas que no recuerdo haber sentido antes.

*~*

* Martina, 17 años, huérfana desde sus 4 años. Su tía es su única familia, pero el futuro es incierto y una enfermedad se encargará de apartarlas.
* Jorge, 22 años, próximo heredero de la empresa de su familia: una enorme cadena de exportadores y productores de vino.
Lo único que necesita para adquirir ese imperio es una esposa..., ¿fácil, no? Para cualquiera menos para él. Alguien que no tiene tiene parejas formales por el simple hecho de que no cree en el amor. Él es como un enorme muro de piedra. Frío y grotesco. Así que, si tiene sus razones, nadie más que él las conoce.
Su intención y objetivo es uno solo. En su juego, quien siente es quien pierde. ¿Pero qué pasaría si se vuelve imposible callar al corazón? ¿Hay lugar para los clichés?