En el fondo de su ser, Ji Won poseía una caja cuya cerradura era un tanto complicada. Pocos conseguían abrir dicha caja, y mucho menos conseguir que el corazón que había dentro latiese más fuerte. Pero entonces se topó con él. Y es que alguien debía otorgarle a Jeon Jungkook un premio por romper lo establecido.