Mi hermana siempre pensó que la vida de un hombre era más fácil, que tendemos a nacer más atractivos, que no tenemos que preocuparnos por la regla, que la industria de la moda favorece a género masculino, y que nuestros perfumes olían mejor. Por la forma en la que ella pensaba, en que todo era más fácil para mi por ser hombre. No estoy de acuerdo.
Con 23 años, siento que no he logrado nada en mi vida, y siento que es ahora el momento de hacer algo. Siento temor al no aprovecharlo, pero no soy una persona que salga a buscar oportunidades, si no del tipo que las espera.
Por lo tanto he fracasado en muchas cosas, aspectos importantes de mi vida. Como en el amor, en lo laboral e incluso en lo social. En cuanto a esto último, siempre me he dicho que no me importa no tener muchos amigos, y que los que tengo son mis verdaderos amigos. Sé que no es verdad, que no puedo contar con ellos en cualquier momento, que no importa cuanto ofrezca, nunca seré correspondido de la misma forma por ellos. Pero soy feliz en mi pequeño e hipócrita circulo social.
Recien termine mi carrera universitaria, ahora soy maestro de biología, que 1) no sabe casi nada de biología, ya que las asignaturas referentes al tema solo son cuatro en toda la carrera, y 2) estoy desempleado. Y si no fuera más vergonzoso, mis padres siguen manteniendo, hasta al punto que tengo el descaro de pedirles dinero para salir de vacaciones.
Esta es una historia de cómo vive una persona común, y como huye a la fantasía a través de sus libros y fantasías. Pero tambien busca de hacerse de una personalidad propia y encontrar el amor.