Harry encuentra un cuento muy interesante en una de las arrastradas de Hermione, "Alicia en el País de las Maravillas". Va al lago para terminar de leerlo mientras acaricia a Crookshanks. Este decidió tomar una pequeña siesta para seguir leyendo después en cuanto se despierta todo le parece de lo más normal solo con la excepción de ver a Draco con orejas de conejo, Harry junto a Crookshanks siguieron a Draco hasta una enorme madriguera de conejo. Harry al asomarse cae por este pero le sorprendió tanto que no dejara de caer y en cuanto lo hizo comenzó a seguir de nuevo a Draco hasta que este se deslizo por una pequeña puerta, por la cual él no entraba con su tamaño normal. Volteo por toda la habitación para conseguir algo que lo hiciera entrar por la puerta hasta que vio un pequeño frasco que en una nota decía: "Bebeme" en una mesita pero aquella mesa no estaba allí cuando llego.