HISTORIA BOYXBOY CORTA.
El amor, como todos sabemos es el sentimiento más hermoso y complicado que ha existido desde la creación de los humanos. Obviamente, cuando tenemos este, sentimos nuestro corazón palpitar con fuerza, nuestra sonrisa agrandarse y la cabeza dar vueltas por aquella persona. Todos sabemos cómo es aquel.
¿Pero qué ocurre cuando ese amor no está dirigido hacia una persona, sino... hacia palabras, letras... una carta?, ¿existe aquel amor? Para él sí.
Thomas, un adolescente que no es guapo ni tiene ojos llamativos y tiene una personalidad común, pudo presenciar algo especial: el amor hacia palabras.
Cuando rompió con su novio—ya tenía bastante clara su sexualidad—rompió llanto y corrió hacia un baño de la estación de trenes para secarse las lágrimas. Pero sus ojos, aún borrosos vieron algo de color blanco... Un sobre. No sabía si estaba dirigido hacia él, es más, sería bastante raro aquello. Pero como todos saben... La curiosidad mató al gato.
Así que: rompió el sobre, sacó aquel papel que era una carta y comenzó a leerla:
«Hola, amigo:
Bueno, la verdad no sé si podría llamarte "amigo", ya que tú no me conoces, y yo tampoco a ti. O tal vez sí, tal vez somos vecinos, compañeros o incluso primos. Aunque espero que no sea así.
Si te ha llegado esta carta, en verdad, eres algo así como un elegido. ¿Y sabes para qué?, bueno... En principal, no pienses que esto es una broma, porque no lo es. Yo he escrito esta carta para hacer un juego, ¿adivinas cuál?. Espero que sí, y también rezo para que aceptes jugar a un "Juego de letras"...»
Asher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel.
Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la chica está loca. Tiene una actitud tan dura que es difícil de romper y suele irritarlo todo el tiempo desde que se ha mudado a vivir con su hermano y él.
Y cuando los chicos del equipo le proponen que no conseguiría conquistar a alguien como Skye, lo ve como un reto que está dispuesto a jugar, una apuesta para conquistar el corazón de alguien como Skye es suficiente para que Asher acepte, pues es demasiado competitivo y no está dispuesto a perder su puesto en el equipo de hockey y pasarse el resto del año en la banca como le han apostado.
Sin embargo, a medida que conoce a Skye, Asher se da cuenta que la chica es todo lo contrario a lo que le ha tratado de demostrar, conquistarla no parece tan complicado como pensaba y el corazón de ella no parece ser el único en juego.