- Me enamoré como nunca pensé que me sucedería, me enamoré sin conocerte, me enamoré desde el primer momento en el que te vi en la puerta de tu casa, vestida de aquella manera, tan hermosa como siempre, nunca pensé que años después me podría pasar esto, pero todavía más fuerte, es único lo que siento, nunca pensé que me enamoraría tan profundo de alguien, nunca pensé que te meterías debajo de mi piel y mira, me tienes aquí diciendo cursilerías pero que son de verdad. - soltaba mientras me miraba sonriente y en sus ojos se notaba ese amor, mientras yo lloraba solo de oírlo. - me cautivaste y no te dejaré marchar nunca, porque sencillamente no puedo, te necesito, te necesito tanto que me aterra, pero al verte a mi lado me tranquilizo. Te amo como nunca amé a nadie, te amo a ti y a todas tus manías, te amo incluso más allá de la muerte. - finalizó susurrándome cerca de mis labios, respiré profundamente y lo besé, como nunca había besado, demostrándole mis sentimientos a través de ese beso.
- Yo también te amo, te amo demasiado. - y de esa manera sellamos nuestro pacto.
Aquí podrás observar como la vida cambia en segundos a mal como a bien, los giros que da la vida, amistades, amores, reencuentros y muchas locuras.
Freen era una omega bastante rara para la personas aquellas decían que era un poco más alta para ser una omega otros que podría dar miedo si te miraba y algunas personas solo quedaban enamorada de verla aunque para Freen todo era normal pues siempre era amable y nunca se enojaba atenta con sus seres queridos era la chica perfecta como sus padres solían decir.
Becky una pequeña omega tan hermosa como la primera nevada era una chica responsable y cuidadosa con todo lo que hacía vive esperando a que aquella omega aparezca una vez más a su vida pues recuerda que alguien la salvó cuando era pequeña más no recuerda su rostro así que vive con la ilusión de que algún día aparecerá.
Pero ¿Qué pasaría si la persona que espera aparece en último año de universidad? ¿La reconocerá?