Sola, cansada, herida. Tras la muerte de la única persona que Daniella amaba sobre todas las cosas, tuvo que aprender a ser fuerte. Cometió errores en el camino, y fue con la llegada de Edwin, que pudo canalizar su dolor e ira de una manera benéfica para otros. Demostrándose a sí misma, que la vida continua.