Wendy entra en la adolescencia y como toda adolescente comienza a sentirse atraída hacia el sexo opuesto. Pero hay un pequeño problema, ella es una Dragon Slayer y por lo tanto ella tiene un instinto que le guía, en este caso le lleva a buscar pareja, alguien de su "especie". Ella tiene miedo de decirle a ese alguien que le ve como una posible y potencial pareja, siempre que quiere decirle sus nervios le traicionan. -Disculpe, Natsu-san- -oh Wendy, dime que tengo que patearle el trasero al estriper - -y-yo... olvídelo-