Tener un hijo cuando tienes solo diecisiete años es algo difícil, ahora a eso súmale el que la madre de tu bebé muere en el parto.
Para Michael su vida se había desmoronado por completo cuando su novia, la chica a la que amaba y madre de su recién nacido hijo, murió cuando daba a luz.
Cuando algo así te sucede muchas veces quieres que todo termine, pero no puedes, porque hay alguien que ahora depende de ti, y todo tu mundo debe girar en torno a esa pequeña persona.
Cuando sientes que todo está acabado, puede aparecer una persona que te salva, aunque no quieras aceptarlo, y puede que ese salvador sea la persona a la que siempre estuviste esperando y creías que habías encontrado.
Pero...
¿Qué sucede cuando esa otra persona es otro chico?
¿Puede el amor y la dedicación ser más fuerte que las opiniones de todos aquellos que te rodean?