Querido Alex Siempre he pensado que eres atractivo, aunque jamas hemos hablado, yo te observo desde lejos y... solo quiero hablarte, pero los nervios me ganan y termino sin hacer nada. Desearía poder acercarme a ti algún día... Bueno así termina la primera carta que no recibirás. Adiós :). Con cariño, Anna.