¿Quién dijo que la vida de un ángel era fácil? ¿Quién pensó que se iba directamente al cielo cuando uno moría? ¿Quién imaginaba que los ángeles no tenían prohibiciones? Está en su naturaleza ser hermosos, inmortales y perfectos, pero nada de eso es fácil y menos cuando se cruza en tu camino una chica de dorados rizos, ojos azules y... humana. --- Esta obra está registrada en SafeCreative, se prohíbe totalmente su copia o adaptación.Todos los derechos reservados