Porque yo era inocente. O lo fui, hasta que lo conocí a él... Cada palabra que decía era como una daga que se enterraba en mí. Cada toque, cada roce era como un fuego que ardía en mis entrañas. Cuantos más besos me daba, más me dañaba... -.-.-.-.-.- * Los personajes le pertenecen a Masashi Kishimoto. * La imagen de la portada no me pertenece. Créditos a su respectivo autor. * Obra Registrada ©