Todo lo que no hicieron por mi

"Soy nada. No existo. No siento el viento, pero me muevo con él. Es mi nuevo cuerpo, invisible, liviano y aún lleno de memorias. El suelo, la altura, mis penas... la vida."

Fantasma está preso. No puede escapar de su propio destino y está condenado a morir entre muchas otras muertes que parecen vivir. Se encuentra con la dicha, el amor, y la vivacidad de otros y pretende recordar.
Este libro es su diario de angustias, pero entre línea y línea, lo alcanzamos a percibir en vida. ¿Será morir, dejar de recordar? ¿O vivir del pasado es morir de todas formas?

"Floto sobre las baldosas del piso y desaparezco. Soy un fantasma. Tengo el poder de volverme invisible ante los ojos del mundo. Una mirada rápida parece captarme escondido entre las partículas de aire y al segundo se olvida, entonces me camuflo de nuevo, sonrío, veo todo desde un rincón.
El antifaz sobre mi rostro se llena de colores que poco a poco se apagan con el frío del viento que rasguña cruelmente el espectro de mi piel. Siento ira. La gente sigue viviendo.

Nota de autor:

No sé como nació mi fantasma. Creo que es mi propia parte muerta, en vida. Darle voz es quitármelo de encima, es quitarle la tristeza y dejarlo libre de su cárcel, que a veces es mía.
Fantasma tiene muchos capítulos. Fantasma sigue apareciendo y a veces me enseña a ver lo que mi propio privilegio de vivir, me oculta.
Fantasma ama. Él es la parte que nadie mira, a quien todos rechazan. Yo lo abrazo y lo presento.
Mucho gusto.

Sobre la portada:

Es simple, ¿Verdad? Es un dibujo a mano alzada, digitalizado, casi sin color. La tipografía... quizás la modifique. Pero, ¿No es lógico? Fantasma se presenta así. Entre líneas alocadas, simples y listas para ser adornadas por la imaginación de quien lo vea.