SUCEDIÓ EN PARÍS

Samantha Johnson es una joven de 16 años que vive en Philadelphia, no es como las chicas populares de Instituto, ella se siente como una auténtica chica normal, del montón, aunque sus padres la incordian día a día ayudándola a autoconvencerse de que tiene que sacar más provecho de si misma. Todo cambia cuando unos nuevos vecinos se mudan a la casa en venta de enfrente, al principio preocupada, Samantha se muestra alerta por la clase de vecinos que puedan llegar a tener, hasta que conoce a Harry Morton, un chico de su misma edad, con muchas cosas en común, van al mismo Instituto, su personalidad con respecto a lo que les rodea es similar y ambos no saben encajar bien con su estética. Los jóvenes se darán cuenta de todo lo que tienen en común cuando decidan ir al viaje de Navidad del Instituto, destino París.