-Amar nunca debería ser visto como un pecado. -Amar a tu hermano, definitivamente si. El secreto que en sus labios se mantenían, no podría ocultarse para siempre. Al menos no ante padre de todo, quien busca mantener un orden en el reino que hizo crecer. Dos destierros, dos seres que obligatoriamente olvidaron su amor y la vida misma en sus ojos coloridos. La vida es dura cuando no tienes más que olvido en ti, cuando el corazón se seca y solo puedes recordar, las cenizas de un amor que nunca debió ser.