A veces pensamos que nuestro día a día es monótomo, vamos perdiendo la visión de lo que realmente es vivir la vida a lo máximo con pequeños detalles que cambian nuestros planes, pues el destino tiene otra jugada. Cada verano transcurría normal, estar de perezosos sin sentirnos culpables, ser libres. ¿Amigos, fiestas y alcohol? Para nada eso iba con Nina, pero que ocurriría si está vez las decisiones que tomó no la llevan al lugar que esperaba.