¿Alguna vez has creído en el amor a primera vista? ¿Ése con el que sólo mirando una vez a alguien sientes ya que tu vida pertenece a su lado, lo conoces? Roderich, un pianista austriaco de veintiséis años de edad, sí. lo encontró una noche en un teatro del imperio alemán, cuando miró por primera vez a Ludwig, un cantante de ópera que hace temblar su cuerpo, alma y mente.