"Una mirada puede hacer que te enamores, dos miradas significa tu muerte." De todos es sabido que la mayoría de la humanidad solo conoce a los dioses olímpicos y algunos de sus vástagos, ignorando a varios seres divinos que viven en la oscuridad de la soledad esperando que alguna vez alguien cuente su historia. Hedoné esperó mucho tiempo para ello y cuando lo consiguió, los humanos no contaron su verdadera historia. Difamaron que era hija de Eros y su legítima esposa Psíque, cometiendo el error más grande de sus vidas. Ahora, varios siglos desde que se supo su existencia, Hedoné vuelve a caminar entre los mortales para que nadie vuelva a confundir ni su nombre ni su ascendencia. ¿El único problema? Ya nadie cree en los dioses griegos. Portada por bxrbbiegxrl, ¡gracias!