¿Es posible ser la misma persona después de arrebatar una vida?, ¿todo podrá ser como antes? Para una existencia solitaria, el finalmente tener algo con lo que aferrarte te da la necesidad de tenerlo, de protegerlo y atesorarlo por sobre todas las cosas. Eso es lo que justamente le ocurre Kirigaya Kazuto, un joven que jamas pudo tener algo real, y ahora que finalmente pudo tenerlo no planea dejarlo ir. Aun si con eso se tiene que convertir en un monstruo, un asesino, un cazador... Un pecador.