The Amberleigh (Primera Parte)

¡Ay, la familia! La necesitamos, pero a veces puede ser un gran dolor de cabeza. En ocasiones, queremos responder a sus acusaciones, regaños, enojos que creemos que son sin razón aparente. Pero no tomamos en cuenta de que cada cuerpo, cada cerebro, cada alma es diferente; en mi mundo puedo ver las cosas de una manera totalmente distintas a como las ven otras personas.

Puede ser que a lo largo de nuestras vidas nos encontremos o vivamos con personas con las que estamos de acuerdo en ciertas ideas, situaciones o decisiones, pero también podremos estar en desacuerdo con otras cosas y es totalmente normal en este proceso llamado: vida.

La vida puede ser tranquila, hermosa y feliz para algunos; horrible y triste para otros y una total locura para muchos. Para mí, la vida es todo eso, solo depende de nosotros a que situaciones decidimos ponerle atención, la suficiente atención como para hacernos sentir todas esas emociones ya sean malas o buenas, es como una fantasía. Nuestra mente es capaz de hacernos sentir lo que no es tangible, imaginar escenarios que no son ciertos, exagerar o no.

Realmente me gustaría que entiendas que la vida puede ser mala, buena, horrible o hermosa. Todo depende de la perspectiva con la que veamos las cosas.

Algo así sucedió con los Amberleigh. Una familia que en sus inicios era de pocos miembros con un apellido muy poco conocido, pero con un destino muy complicado.
Quién se podría imaginar que enamorarse dejaría a toda su descendencia con la sangre maldita.

Qué triste, ¿no lo crees? Por unos pocos pagan todos. La historia de los Amberleigh está llena de amor pasión, amistad, odio, traición y por supuesto, magia y fantasía.