- No quiero saber nada de ti, vete.- Las lágrimas fluían por tus ojos, tus labios estaban hinchados al igual que tus ojos, tus mejillas rojas cual manzanas. Me convertí en lo que juré destruir... Pero... ¿Por qué actúas como si nada? ¿Por qué no me odias? ¡Odiame!All Rights Reserved