En un mundo donde coexistimos con los humanos, donde tenemos que vivir escondidos por lo que somos, aún en esta vida compartida, los Ángeles protegen y aman a los humanos, pero los Demonios solo pretenden ir contra ellos, murmurando en sus oídos sin ser descubiertos, haciendo que el humano cometa todo tipo de pecado, sin que Dios les conceda el perdón, a excepción de aquellos que buscaron el perdón y se arrepintieron, encontrarán un lugar a su lado, pero aquellos que se llenaron de traición, y no buscaron el perdón de Dios, haciéndolos ahogarse en sus propios pecados, viviendo en agonía, y sin demostrar sentimento alguno hacia los demás destinados así al infierno.