Alaia Black es una chica rubia de ojos celestes, tez clara y cuerpo común, aparte de todo lo anteriormente dicho hay otra cosa, ella, es una mujer loba, y no cualquiera, ella es la hija de Selene, la diosa luna y Jhon, el alfa de los alfas.
Alaia sabe la existencia de los lobos, como también sabe que ella es uno, pero lo que ella no se esperaba es ser, la líder de todas las razas.
La llegada de Catalaia White a la manada Blood Moon, donde Alaia permanecía, es de gran ayuda, ya que Alaia y ella se hacen grandes amigas, el día de su transformación Alaia descubre todo, de lo que en verdad era ella y la verdad de sus padres, como muchas cosas más que se irán sabiendo a medida de la historia, si quieres enterarte de cuales son esas cosas te recomiendo que empieces a leer esta novela, espero les guste.
[Desgaste rápido + Mimos grupales + Lider femenina gentil + Escoria aplastante]
Su Zhiruan había muerto inesperadamente y estaba atada al Sistema de parto.
Completar tareas le haría ganar la vida eterna y una riqueza inagotable.
¡Esto suena genial! En su última vida, no tuvo hijos. Después de unirse al sistema, fue bendecida con muchos hijos y fue mimada hasta el cielo por el protagonista masculino.
¡Todos sus hijos eran obedientes, sensatos y fáciles de criar, lo que la convirtió en una verdadera portadora de fortuna!
[Escenario uno]: Cinco años después del reinado del Emperador, el harén no había producido descendencia. Después de una noche de pasión con Su Zhiruan, el harén se llenó de príncipes y princesas.
El Emperador los adoraba incluso durante las sesiones de la corte, dejando de lado su comportamiento imperial para jugar con los niños y enseñar personalmente a los príncipes. Su mirada hacia Su Zhiruan se volvió cada vez más ferviente.
"Querida, ¿te gustaría ser mi Emperatriz y juntas cuidar de nuestros hijos, convirtiéndote en mi esposa por encima de todas las demás?"
[Escenario dos]: Se rumoreaba que el caballero más misterioso de la capital estaba discapacitado. Se acercaba a la mediana edad y no tenía descendencia.
Sus parientes lo observaban con curiosidad y deseaban su muerte a diario.
La llegada de Su Zhiruan desbarató por completo sus planes, ya que ella le dio a este apuesto hombre una prole de hijos.
Cuando pensó en irse, él la abrazó, sus ojos normalmente fríos y orgullosos llenos de súplica. Su voz era profunda y baja.
"Esposa, por favor no me dejes a mí ni a nuestros hijos. Te lo ruego".