Jess creía que esas historias solo pasaban en las películas, nunca se imaginó que esa vez le tocaría a ella encontrar a su "príncipe azul"; Liam no era perfecto al cien por cien, pero era SU príncipe azul. Todo comenzó cuando un camión de mudanzas apareció una mañana frente a su casa; ¿acaso era posible que tuviera tanta buena suerte?