La única palabra que pronunció Alex cuando descolgué el teléfono fue tu nombre, "Lucrecia", dijo con la voz rasgada por las lágrimas, y supe que ya no volvería a verte. Dejé mi trabajo un día después, y seguí tu rastro, lanzándome de lleno en los turbios brazos del mundo de la noche, sin medir las consecuencias, sin pensar que podría descender al mismísimo infierno del que tú no pudiste escapar. Mi unico aliado es un hombre al que detesto, mi objetivo, una pista que se desvanece. Oh, Lucrecia, ¿en qué me he convertido? ¿En qué me has convertido? *Advertencia. Aunque la historia no está clasificada como adulta, por ahora, si hace mención a temas como la violencia, el sexo, las drogas o la prostitución.