El comienzo
Michael iba a comenzar el instituto. Cuando terminó el colegio tenia bien claro que no volvería a pasar un año con esa gentuza que los llamaba compañeros. Le insultaban, le pegaban, incluso los profesores le hacían quedarse copiando lineas interminables de castigos a pesar que no entendía el porque. Para colmo, sus padres no sospechaban nada, y le hechaban la bronca por no tener amigos. Eso no se elije.
A pesar de todo, estuvo todo el verano autoanimándose para intentar empezar otra vida en el instituto. Llego septiembre. Llegó la hora.
La primera sensación al pisar un pie en el instituto, tuvo una mezcla de miedo, cobardía e inseguridad, pero a pesar de ello, siguió adelante y se sentó en la parte de atrás de la clase, para no llamar demasiado la atención. Al menos eso pensaba.
Allí conoció a John, un inmigrante noruego. Era un poco payaso y le gustaba llamar la atención. Según tuvo la oportunidad, se burló de Michael. Gritaba en público sobre la cojera que tenía el cada día más deprimido jóven.
Nunca tuvo el valor suficiente para pegar a nadie, a pesar de las "peleas", si un 5 contra 1 se denomina pelea. Estaba muy acomplejado, y no sabía reaccionar ante las burlas. Por eso, cada vez se burlaban más de él. Al mes siguiente, ya tenia fama en el instituto por ser el cojeras, el pierna inútil o la nena que no sabia andar. Todo por un payaso.
Para colmo, sus compañeros apoyaban al subnormal de Jhon, e insultaban frecuentemente a Michael. Ya nada podía hacer.
Mientras los secretos más oscuros de la Casa Blanca emergen, Jennifer y Barron se encuentran atrapados en una red de poder, mentiras y traiciones. Él debe decidir si seguirá siendo el hijo obediente o se convertirá en la voz que su país necesita. Ella deberá aprender a sobrevivir en un mundo donde la verdad es la mayor amenaza.
En un escenario donde el amor y la justicia parecen imposibles, dos almas opuestas luchan por ser libres, aunque eso signifique enfrentar al mismísimo presidente.
Cuando el poder y el corazón entran en conflicto, ¿qué estarán dispuestos a sacrificar para encontrar su propia verdad?