Dicen que de amor nadie se muere, pero siempre hay excepciones. -Voy a volver- me da dos besos en las mejillas secando mis lagrimas- y cuando lo haga, vamos a poder estar juntos y gritar al mundo lo mucho que nos amamos, te lo prometo Zafiro.- Que estúpida fui al creer en sus palabras, en su promesa. La sombra de un viejo amor, puede ser una perdición, o tal vez solo la mia.