Ellos no eran la pareja perfecta, pero el amor que sentían el uno por el otro lo superaba todo. Sus amigos les habían dicho que eran una pareja que estaba destinada a ser, como en todas esas películas románticas. Ellos estaban seguros de lo que sentían, al menos hasta aquel día:
"-¿No sabes quien soy?
-Pues sinceramente estoy un poco desorientado en este momento.
-Max, soy yo, Ámbar, soy tu novia, ¿No me recuerdas?- el se sorprendió
-¿Novia?, vaya, lo lamento pero yo no recuerdo tener una novia llamada Ámbar, ni siquiera recuerdo haberte conocido,- se rasco la nuca -en verdad lo siento."
Él se siente incompleto.
Ella esta segura que lo puede volver a conquistar.
Él no la quiere decepcionar.
Ella lo quiere de vuelta.
Pero las cosas no pueden ser del mismo modo dos veces pero eso no quiere decir que todo este perdido.
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...