James estaba feliz, por primera vez en su vida, comenzó a ver colores cuando todo parecía quedarse en tonalidades negras y grises. Creía que al fin había encontrado esa paz que un día imaginó, creyó, ilusamente, que su pasado logró estancarse en eso, en lo que fue, pero entonces, lo que creía estar atrás, en realidad jamás se fue.
¿El pasado se fue? Ni de lejos.
Es más, se intensificó con más fuerzas y comenzó a perder las esperanzas de que su felicidad duraría para siempre. Su relación se fue a la basura, conoció a alguien más, indagó aún más en la causa de la muerte de su familia y entonces... Todo se jodió.
Sentimientos mezclados. Una muerte y un destino final.
¿Conseguirá la paz y felicidad eterna?
Segundo libro de "El Perfecto Asesino"
Prohibida su copia y/o adaptación