"No es justo, si me das esa maldita mirada oceánica tuya sabes que voy a terminar llorando." En donde los ojos de Gerard son de un bonito color azul marino, apagado y sin brillo, los cuales Frank no puede dejar de observar cada que tiene la oportunidad de quedarse en vela a su lado, dándole la compañía que tanto le falta.