"Para la semana que viene traéis un reportaje maquetado sobre una manifestación" fueron las palabras del profesor de fotoperiodismo en nuestra primera clase. Acababa de mudarme a Madrid y nunca había ido a ninguna manifestación, pero mi compañera de clase Julia -mejor conocida como mi salvadora-me enseñó el instagram de una amiga suya que llevaba el colectivo feminista de la universidad. Además de poder ayudarme era guapísima, así que la seguí, intenté ligar con ella y todo quedó escrito en estas páginas.