Finalmente, luego de sangrientas luchas y dolorosas decisiones, ganaron. Le quitaron el guantelete a Thanos, lo despojaron de su poder y lo derrotaron. El universo recuperó su mitad perdida. Las vidas que injustamente fueron arrebatadas, regresaron. Todos los mundos y seres se regocijaron por la derrota del titán, festejaron el regreso de aquellos que habían perdido. Mientras la Tierra recibe al recién restaurado y renovado equipo Avengers con ovaciones y grandes agradecimientos, sus miembros deambulan por los pasillos del complejo, atrapados en la alegría de su victoria, el alivio de recuperar a sus seres queridos, agonizante dolor por la decisión tomada y culpa, por no haber sido capaces de hallar otra solución. Muy pocos en el universo sabían que para lograr la razón de tanta alegría, para recuperar todas aquellas vidas... una tuvo que ser sacrificada.