Dicen que los opuestos se atraen y ellos dos eran un claro ejemplo.
Ella un tanto relajada, sin darle importancia a lo que pasará.
Él, sin relajarse demasiado porque su mente está todo el día trabajando, y calculando cada paso que haría.
Ella más espontáneo, sin pensar demasiado.
Él pensando cada acción que haría, pensando en el después de su actuar.
Ella, más extravagante respecto a como se viste y como actúa.
Él, más correcto respecto a su accionar y su manera de ser.
-Se que vamos a terminar juntos, bonita- dice, en un tono burlón, Apolo, acariciando la mejilla de Ivy, mirando como ésta se ponía cada vez más roja.
- Se Que hoy voy a matarte, lindo- dice Ivy, en un tono irónico, sonriendo falsamente y sólo le da un manotazo cuando intenta acariciar sus labios.
Así es como es su historia, y si querés seguir sabiendo como se desenlaza, te invito a leerla