(En procesó). Una noche fue suficiente para acabar con todo, para destruir lo todo. Ya no me queda nada, nada por lo que luchar, ya no tengo un motivo por el cual luchar, por el cual despertar cada mañana, gracias a el. Mi mente se a vuelto un laberinto sin salida, donde cada paso que doy me va destruyendo poco a poco, de la manera más desgarradora posible. Aunque mi mente no lo pueda recordar físicamente aún puedo escuchar su asquerosa voz repetir se en mi cabeza una y otra vez como un cd rayado. Eso es lo único que necesito para reconocerlo y matarlo de la misma manera en la que mato a mis padres para hacerlo sufrir, como el me a echo sufrir a mi, dejándome vivir.All Rights Reserved
1 part