Solo lo contare una vez mas, para ustedes. Bueno.... Ese día me levante sin acordarme de nada. Nada. Para ser sincera, lo ultimo que pensaba era que me había pasado esto. ¡Pero no! No es una historia triste, mas bien es la historia de lo mejor que me pudo haber pasado en la vida después de haber probado los caramelitos de dulce de leche, carajo eso si que sabe rico. Como sea, para acortarlo, me levante y busque el primer espejo que encontré ¡Y no creerán lo que vi! Una flaca buena. ¡Si! Una flaca buena. De esas con labios rojos, ojos azules (que obviamente no se los tapa sus cachetes regordetes), uñas largas, mirada que mata y su estúpido (pero siempre buenon y Don Juan) novio popular que se cree el único chico que vale en el colegio. Ese fue el comienzo de todo. Ahora si, ya les conté ¿contentos? "-¿De que trata tu poesía? -Del paraíso- suspiré-. -¡Ay que lindo! ¿De que hablarás? De la tierra ¿no? -No tonta, de la comida."