Viktor Nikiforov es uno de los mejores patinadores artísticos de hielo del mundo, lo cual le traería fama a montones si no fuera por un pequeño detalle: Era un Omega. Así que tenía que enfrentarse a una sociedad arcaica donde el más grande sueño de un Omega debía ser tener un buen esposo, una posición económica acomodada y un montón de cachorros. Pero Viktor Nikiforov luchaba para demostrar que era el mejor del mundo, él se negaba a ser un Omega ordinario, él debía alcanzar la cima y demostrar su potencial. Sin embargo a pesar de ser fuerte y autosuficiente no se negaba al amor y había un patinador en especial que hacía brincara su corazón... el japonés Yuuri Katsuki. Los personajes no me pertenecen así como las imágenes, derechos a sus respectivos autores.