Había una vez, en un reino muy lejano... no, en esas historias siempre alguien tiene que ser salvado y en esta historia no hay ni buenos ni malos; ni príncipes ni princesas solo personas. ¿Estás decepcionado? No deberías. Verás, que las mejores historias no son los cuentos de hadas sino las que nos suceden, aquellas historias que nos cambian la vida y nos dejan huella. Un felices para siempre no es ni tan feliz ni tan para siempre. Podrás decir que estoy equivocado o que soy un amargado pero si algo he aprendido en estos 22 años de vida que tengo, es que es mejor disfrutar algo pasajero que esperar a que llegue algo que dure para siempre. Pero no te preocupes, que ten por seguro que la historia que te voy a contar sí es de amor, pero de la forma en que yo lo entiendo.