¿Qué te crees muchachito? -le dijo enojada. Él se enderzó y se acercó nuevamente. -Eres mía. - ¿Tuya? -lo miró de arriba abajo-. No gracias. Dejé de cambiar pañales hace diesisiete años. Volvió a atraparla contra la pared. -Soy un hombre y te lo demostraré.All Rights Reserved