" Él busca a la mujer con la que compartirá su eterna vida" " Ella espera que llegue el día en que pueda salir de aquel bosque " ... Hace doce años La pequeña niña de rizos dorados corre entre la maleza tras una mariposa de vivos colores, sin darse cuenta del monstruo que la sigue corriendo tras de ella, saltando de rama en rama. Ella rie siguiendo a aquel animal que no deja de aletear con sus preciosas alas. Aquel montruo sonrie malicioso viendo a la pequeña. - ¡Gianna!- Grita la anciana a su nieta -¡Ya es hora de comer, vuelve! La niña soltó un quejido de molestia pero no se negó, solo se dio media vuelta , volviendo a la choza que tenian por casa ella y su abuela, en medio del inmenso bosque. Él salió de la sombra de un arbol siguiendo con su mirada el camino que tomo la niña, recordando sus rizos dorados moviendose con la brisa suave, su rostro bello y angelical y su vestidito, ahora sucio por el barro. - Gianna - Susurro él cerrando los ojos, saboreando aquel nombre entre sus labios. - MI ELEGIDA. Esa frase bastó para que las nubes antes blancas se volvieran negras y empezaran a caer rayos acompañados de una lluvia capaz de inundar todo el bosque, que la brisa suave se transformará en un vendaval que arrasara con todo. Él sonriente chasqueó sus dedos y en ese instante una gran bandada de murciélagos aparecieron cubriendo su cuerpo, acabando por desaparecer. ¿Toda perdición tiene salvación? ... * Os recomiendo primero leer mi primera historia: TE ENCONTRÉ.