Flor De Cerezo: Una Vida Efímera

Han pasado algunos años desde que Sesshomaru dejo a su protegida, Rin, bajo el cuidado de los humanos. En aquella aldea en la que residía su hermanastro Inuyasha y su, ahora actual, esposa, por lo que el gran demonio no tendría que preocuparse de la seguridad y bienestar de la pequeña Rin.
Los años pasan rápidos y sin demora para un humano, mientras que los años son irrelevantes para un demonio puro como lo era él. Sin embargo, a cada visita nueva de Sesshomaru notaba claramente como Rin continuaba ese ciclo de vida tan corto. Debatiéndose que era realmente lo correcto, pues había prometido que la dejaría tomar una decisión cuando así ella lo decidiera, sin ninguna prisa.
Su mirada perdida se fijo en un pequeño árbol de hermosas flores rosadas que se desvanecían con el aire poco a poco y caían en una suave danza al césped. Tal vez la vida de Rin podía ser como aquel árbol, algo tan efímero que de un momento a otro ya no estaría ahí con él.
Mientras el demonio se encontraba en aquel debate mental, su pequeña protegida continuaba su vida con felicidad en la aldea de humanos. Tratando de adaptarse nuevamente a la vida que había desechado hace mucho tiempo atrás cuando siguió al demonio perro.
Rin había alcanzado en poco tiempo sus catorce años. Y todos miraban con asombro lo bien que la adolescencia le había llegado a la joven. Y no solo había sido Sesshomaru quien había notado esos bellos y cautivadores cambios en su protegida, sino también lo había hecho el joven Kohaku, quien de vez en cuando regresaba a visitarla de forma más periódica que el demonio. Llegando a tener una relación más cercana con Rin.
"¿Sabes lo que significa entregar una peineta a una mujer?"
"Nada importa si estás conmigo".
"Es una decisión muy difícil".
-
Historia basada en el anime y manga Inuyasha de la mangaka Rumiko Takahashi.

No se permite el plagio y/o copias y tampoco adaptaciones sin mi autorización.
-
Muchas gracias por leer.