hace unos días, luego de tantos meses, te ví, volvimos a cruzar miradas, y de nuevo el pulso se me aceleró, vos tan bella cómo siempre, yo tan estúpidamente enamorado de vos cómo siempre.
me aguanté las ganas de abrazarte, también me aguanté las ganas de besarte, intenté ser ese chico frío y serio como solía ser desde la última vez que nos vimos, pero debo admitirlo que no fue una gran idea, nuevamente me volví estúpido a tú lado.
me vinieron esos recuerdos que tuvimos juntos en nuestro tiempo cómo pareja, y cómo no, tantas risas, tantos llantos, lindos y malos momentos que compartimos, cómo aquella vez que nació mi sobrino, tu estuviste a mi lado y me acompañaste a la clínica para conocerlo, aún sabiendo que ese día era 14 de febrero, día de los enamorados, o ese mal momento cuándo se me derrumbaba el mundo, y tu estuviste ahí con esos abrazos que me tranquilizaban
dije que no volverías a aparecer en mis escrituras pero ya te lees, dije que no volvería a enamorarme y ya me ves.
aún recuerdo aquella vez en la que te dije que me estaba viendo a ver con alguien, pero, ¿sabes que? te mentí, como podría hacerlo si sigo eternamente enamorado de vos.
Asher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel.
Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la chica está loca. Tiene una actitud tan dura que es difícil de romper y suele irritarlo todo el tiempo desde que se ha mudado a vivir con su hermano y él.
Y cuando los chicos del equipo le proponen que no conseguiría conquistar a alguien como Skye, lo ve como un reto que está dispuesto a jugar, una apuesta para conquistar el corazón de alguien como Skye es suficiente para que Asher acepte, pues es demasiado competitivo y no está dispuesto a perder su puesto en el equipo de hockey y pasarse el resto del año en la banca como le han apostado.
Sin embargo, a medida que conoce a Skye, Asher se da cuenta que la chica es todo lo contrario a lo que le ha tratado de demostrar, conquistarla no parece tan complicado como pensaba y el corazón de ella no parece ser el único en juego.