Entre Las Sombras Del Ayer han quedado atrapadas un sin fin de almas condenadas a la perdición en el mismo infierno. tan repulsivo para algunos y degeneradamente divertido para otros. Entre los burdeles de la ciudad perdida en la avaricia y sobervia reinan, la gran ciudad de París, Francia. En los rincones más sombríos se ocultan mounstros horribles, en las lúgubres estructuras se ocultan las horribles casas que la lujuria de los hombres se ha de saciar con los delicados cuerpos de las mujeres que ofrecen su carne a cambio de un par de billetes. Los demonios se callan sólo con la dulce y dolorosa muerte de la desdichada alma.