¿Depresión? Mucha gente no le toma importancia a esa palabra, muchos pasan por alto la salud mental, pero que pasa cuando tu misma te odias, cuando odias todo de ti, tu cuerpo, tu nariz, tu boca, tu vida. Es fácil decir que todo pasará, pero la depresión es una cosa seria y si la persona realmente no está dispuesta a salir de ese hoyo, ninguna otra persona podrá sacarla, no importará quien lo haga, porque la única que puede es uno misma.
Ella se siente diferente al resto, rara, odia todo. No soporta más su vida de mierda. Pero quizás no todo está perdido, quizás puede encontrar el camino hacia la luz.
Freen era una omega bastante rara para la personas aquellas decían que era un poco más alta para ser una omega otros que podría dar miedo si te miraba y algunas personas solo quedaban enamorada de verla aunque para Freen todo era normal pues siempre era amable y nunca se enojaba atenta con sus seres queridos era la chica perfecta como sus padres solían decir.
Becky una pequeña omega tan hermosa como la primera nevada era una chica responsable y cuidadosa con todo lo que hacía vive esperando a que aquella omega aparezca una vez más a su vida pues recuerda que alguien la salvó cuando era pequeña más no recuerda su rostro así que vive con la ilusión de que algún día aparecerá.
Pero ¿Qué pasaría si la persona que espera aparece en último año de universidad? ¿La reconocerá?