Una semana tiene siete días. En siete días hay ciento sesenta y ocho horas y en ellas hay diez mil ochenta minutos. Dazai solo ocupa uno de estos para pensar qué decir cada vez que decide acercarse al chico que le gusta. Teniendo la semana del amor para confesar sus jóvenes sentimientos, Osamu prefiere improvisar y dejar todo en manos del destino. En su posición como ex rompecorazones empedernido, la verdad es que es lo más prudente. En especial si la personita a la que desea abrir su corazón es alguien bastante cercana. Vecino. Compañero. Amigo. Futuro esposo. Dazai tiene los siete días donde el amor vuela con el viento para llamar su atención de forma romántica, o el resto del año para hundirse lentamente en un poso de desesperanza y soledad llamado "friendzone". |Capítulos cortos. |Editada. |Completa.
10 parts